miércoles, 18 de mayo de 2011

Máximo Lorenzo

Es difícil describir lo mucho que lo amo, lo tanto que lo necesito y lo mucho que lo extraño cuando me voy por más de 12 horas de casa...
Debe ser porque costó llegar, porque el camino estuvo MUY lleno de piedras, porque cada día que pasaba era un día más, porque fueron muchos los días de espera, muchos los días de llanto, muchos los días que corrimos.
Porque sin darme cuenta llegué a un punto en el cual veía que los días pasaban MUY lento, era como si nosotros estuviésemos inmóviles mientras todo el mundo corría y se avasallaba a nuestro alrededor. Porque en ese viaje nosotros pagábamos más peaje. Porque se sintió injusto. Porque tenerlo acá es fruto de mucha sangre, mucho sudor y MILES de lágrimas. Porque se que todo eso valió la pena.
Verlo hoy es sentir que revivo cada vez, como si no hubiera nada más, como si el mundo parara. Pero esta vez para que podamos ver el paisaje, para que podamos disfrutar, porque se que nos merecemos (y él más que todos) ser felices. Porque desde muy chico tuvo que pelear, porque desde ahí adentro tuvo que remarla, sin siquiera saber que acá afuera nosotros también peleabamos...
Por eso y más creo que Máximo es muchas cosas, pero sobre todo Máximo es FUERTE. Y eso me demuestra que se puede con lo que sea. Él está acá para recordarme todos los días lo importante que es no planear nada y dejarte vivir, lo importante que es soñar y confiar... Lo importante que es amar. Y vivir.
Salud!